... ayer estuve hablando por Msn con Xavi, un chico con el que empecé una relación este verano. Lo nuestro fue un amor a primera vista, me sonrió, le sonreí y ahí empezó lo nuestro... Demasiado corto, demasiado intenso lo que yo sentía, demasiado el dolor que sentía cuando no estaba a su lado, cuando me evitaba con excusas estúpidas que me dejaban descolocada, porque yo sentía que cuando me besaba él también perdía la noción del tiempo...
La noche de nuestra discusión, esa noche en la que me hizo sentir como una mierda, en un ataque de rabia le confesé lo de mi anorexia, lo de mi obsesión por ser PERFECTA en todo y ante todos... gran estupidez. Desde ese momento Xavi se apartó de mi como aquel que se aparta de un leproso o de un perro rabioso... Y mis intentos por recuperarlo fueron inútiles... quizás mejor así.
Pero lo que pasó me hace pensar en cómo nos ve la sociedad. Mientras que las industrias farmacéuticas se gastan más dinero en lanzar al mercado productos milagrosos para adelgazar de lo que gastan en investigación para curar enfermedades como el SIDA, mientras que las revistas bombardean a sus lectoras con trucos para perder peso, dietas estúpidas y poco saludables y anuncios de clínicas de cirugía estética; nosotras, que también estamos dentro de ese numeroso grupo de personas que quieren conseguir un cuerpo mejor, somos rechazadas y tratadas con asco, como si fuéramos delincuentes, y no como lo que somos, niñas sensibles, receptivas y constantes... enfermas, débiles, víctimas a nuestro modo del mundo de la moda.
Le llego a decir a Xavi que tengo cáncer (Dios no lo quiera nunca) y aún lo tendría a mi lado. Pero con la anorexia es distinto, porque cree que es decisión mía, que porque quiero paso hambre y me siento sin fuerzas, totalmente obsesionada con mi peso hasta el punto de no dejarme vivir...
Y le echo de menos, a pesar del desprecio que me demostró, porque al estar con él se me curaban todas las heridas del alma y me planteaba seriamente mejorar como persona, en todos los aspectos, dejando quizás un poco de lado el físico... Por otro lado, no quiero dejar de cuidar mi físico. El físico es la carta de presentación de cada uno, lo primero que se ve y por lo primero que el mundo te juzga. Y necesito ser aceptada y querida por el mundo. Todos lo necesitamos de hecho, lo único que algunos decidimos luchar por ello y otros son perezosos y cobardes y no afrontan sus puntos débiles...
Injusticias del mundo en el que vivimos... un mundo que permite que se pise a los débiles para fortalecer a los fuertes. Grotesco.
Cambiando de tema, en la uni, hablando con un amigo y al comentarle que era vegetariana me ha dicho "Ah si?? Por eso te estás quedando tan seca, no?" ---> I'm happyyyyy ^^
Aunque lo de "tan seca"... yo no diría lo mismo, tengo los brazos fofos!! Hago pesas cada día y, aunque cuando hago fuerza se nota que mi brazo es todo músculo, cuando los dejo normales siguen fofos y gordos!!! Aggg... supongo que será la forma de brazos de cada uno... pero es un fastidio, me encantaría tener unos brazos delgaditos como palos...
Así que habrá que seguir esforzándose!
Thinspo para motivarnos. Besitos de café!!
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